Hay prendas que no sólo brillan por ser la última tendencia, sino que además son prácticas a rabiar. Este es el caso de la fiebre del trench de gasa o seda que se ha extendido como la pólvora en el universo «fashionista». Porque la primavera todavía puede ser traicionera o porque puede ser que residas en una zona en la que incluso bien entrado el verano se requiere algo de abrigo.
Fotos: Haider Ackermann, Max Mara, Hellessy
La diferencia con el trench tradicional reside en el material, estas nuevas «gabardinas» carecen del tejido tradicional diseñado para combatir la lluvia y sólo mantienen el corte de las originales. En su lugar están hechas de materiales finos que van desde la seda real en el caso de las marcas más caras hasta el raso o la gasa sintéticas en las marcas «low cost.
Fotos: Elaine Kim, Wood Wood, Stella McCartney.
Es una prenda muy cómoda y agradecida, estiliza una barbaridad si llevamos alguna prenda más ajustada debajo. Si tienes las caderas anchas te irá genial para disimular, y si quieres marcar cintura puedes elegir alguna que llevecinturón. Además, al llevarse en un largo tres cuartos y al tratarse de tejidos fluidos añaden unos centímetros, haciéndote parecer más alta. Celebrities como Kim Kardashian, Kendall Jenner o Gigi Hadid los llevan en todas sus versiones y consiguen sacarles el máximo partido arriesgando con mini crop top debajo y terminando el look con un trench de seda en algún color de temporada.
Fotos: Datura, Raquel Allegra, Valentina Kova
Pero además de ser muy favorecedores son tremendamente versátiles, se pueden llevar tanto con looks más formales o de noche con unos vaqueros y unas sneakers. Te sorprenderás a ti misma combinándolos con absolutamente todo lo que tienes en el armario.
Fotos: August Getty Atelier
Otro look posible para aquéllas que le cojan el punto es llevarla a modo de vestido camisero. Esto depende un poco más del tipo de trench que tengas, algunos están demasiado armados en el corte y funcionan exclusivamente como chaquetas.
Fotos: Ayr, Shopbob, Pho London
Los colores más populares están dentro de la gama de los pasteles, rosas empolvados o tonos grises ¿cuál es tu favorito?
Foto cabecera: Thinkstock